La pseudo-filosofía en torno al libro de El Secreto tuvo (y tiene) muchísimo éxito porque se basa en premisas que no pueden comprobarse. Juega con la necesidad humana de intentar controlar lo incontrolable y utiliza atajos mentales que son “naturales” para nuestro cerebro.
A lo largo de este artículo veremos algunas ideas que se han conseguido filtrar en el imaginario colectivo y qué opina la psicología la respecto.
No os voy a engañar… Las respuestas de El Secreto son más directas, más fáciles de algún modo. Las que nos da la psicología, en cambio, requieren esfuerzo, constancia y trabajo… Eso sí, las probabilidades de mejorar tu vida se disparan.
Palabra.
La Ley de la atracción
Los pensamientos (emociones, creencias, anhelos, etc.) que una persona posee (sean estos conscientes o inconscientes), provocan consecuencias afines a lo que se desea. A este proceso se lo describe como «vibraciones armoniosas de la ley de la atracción».
A ver por dónde empezamos…
Los pensamientos pueden mejorar nuestra percepción sobre la realidad, pero no modificarla en sí.
Cuando en psicología hablamos sobre cambiar la forma en la que pensamos, lo hacemos porque existen un conjunto de mensajes que nos lanzamos que están distorsionados (ya sabéis, la dramaqueen). Lo que está demostrado es que los mensajes rígidos, absolutos y automáticos no son nada útiles en nuestro día a día, por lo que toda la corriente de terapias cognitivas nos enseñan a flexibilizarlos a través de datos objetivos.
La diferencia por lo tanto es:
El secreto: Si lo piensas lo tendrás
Psicología: Cambiar ciertos errores cognitivos hacen que estemos mejor adaptad@s a la realidad.
“Pide y el Universo te lo dará. No te preocupes del cómo”
¡¡Al contrario!! Lo que tenemos es que tener un plan para trabajar sobre cómo conseguir aquello que deseamos.
El hecho de pensar que sólo deseando tendremos lo que queremos no nos hace responsables sino víctimas. Atribuir de forma externa lo que logramos (y lo que no) nos hace ceder el control sobre nuestra propia vida.
La psicología cuenta con herramientas con las que aproximarnos a nuestro objetivo… Y por supuesto que cuenta tener una actitud positiva, pues siempre te harà generar conductas proactivas, pero no es suficiente. Si quieres peces, tienes que mojarte el culo. No hay más.
“Si lo deseas, lo conseguirás. El Universo conspira a tu favor”
En este punto vamos a entrar en una realidad que no es aceptada por mucha gente: la vida, a vecs, no se pone de nuestra parte. Esto quiere decir que puedes trabajar mucho, hasta la extenuación, para alcanzar una meta y aún así no conseguirlo.
Piensa en las personas que opositan, deportistas que dejan todo de lado para ir a unas Olimpiadas… No todo el mundo consigue su plaza ni la medalla de oro ¿verdad? ¿Significa ésto que no lo han deseado lo suficiente?
Lo que más nos acerca a aquello que queremos es trabajar y ser constantes… (sé que no es una frase que se vendería mucho en el caso de ponerla en una taza) Y, aún así, puede que no llegues a tu objetivo. ¿Esto significa que no debemos tener sueños? Para nada. Ser conscientes de esta realidad nos hace más fuertes, porque, en el caso de fallar, encontraremos la manera de seguir intentándolo.
Esta afirmación tiene, además, una vueltita que a mí personalmente me parece terrible.
Si deseo algo, lo atraigo… ¿Esto quiere decir que si me pasan cosas malas lo he deseado de algún modo?
Este tipo de conclusiones pueden tener consecuencias nefastas para la salud psicológica.
Y por si te lo habían dicho antes en algún lugar:
- No, no te has buscado esa enfermedad.
- Tu familiar por desgracia murió, pero eso no significa que no quisiera vivir.
- Tienes derecho a saber que no merecías ese accidente y, por lo tanto, sentirte enfada.
“Si haces cosas buenas, te pasarán cosas buenas. El Universo te devuelve aquello que das”
La Falacia de la Recompensa Divina es un sesgo tipificado… Y aquí viene otra frase no-vendible: La vida no es justa. A las personas buenas les pasan cosas malas y hay personas malas que nunca reciben un castigo.
Cuando actúamos de forma que consideramos éticamente buena sólo porque esperamos que se nos devuelva de alguna forma, en primer lugar, no estamos siendo genuinamente buen@s, en segundo, podemos llegar a frustrarnos muchísimo cuando no recibamos la recompensa que creemos merecer.
“Agradece”
En esto estamos de acuerdo. La psicología ha encontrado evidencias que las personas agradecidas son más felices (esto es una expresión muy generalista, se puede matizar de muchos modos, pero para que nos entendamos). La diferencia está en que El Secreto utiliza el agradecimiento para que caigamos en el Sesgo de Confirmación.
Es decir, si deseo algo y voy a gradeciendo cada pequeña señal que el univderso me manda, focalizaré ni atención en estas recomepensas, por lo que terminaré creyendo que efectivamente la ley de la atracción funciona.
Pongamos un ejemplo:
“Quiero ser millonaria”
Lo que nos dice el secreto es que cada pequeño avance que hagas, por pequeño que sea, debes agradecerlo. Si me encuentro un euro, por ejemplo, tengo que dar gracias al universo como si hubiese encontrado un millón. El hecho de buscar estas señales y agradecerlas, nos hace distorsionar la realidad pues no es que te estés convirtiendo en millonaria, es que te centras en la idea que así es.
Esta trampa es una de las más utilizadas por este tipo de pseudofilosofías… ya que consiguen hacernos creer que efectivamente, funcionan.
“Si piensas y hablas cosas negativas atraerás cosas negativas a tu vida”
No sólo por hablar vas a rodearte de circunstancias vitales adversas. Expresarnos salva en ocasiones y evitar pensamientos negativos, no sirve absolutamente de nada.
Es cierto que no es demasiado útil estar todo el día rumiando una idea (sea la que sea). La psicología aboga por aprender a cortar y a no fusionarnos con los pensamientos. Esto no queire decir ignorarlos, es más una cuestión de aceptarlos en su justa medida.
A este ¿mantra? o camino o no sé cómo le llaman… se ha añadido la idea de las personas tóxicas, un comodín que se le atribuye a cualquiera que no está siempre feliz. Las personas sufrimos, nos enfadamos, estamos tristes… Y tenemos derecho a hacerlo. No soy tóxica por expresar un desagrado. No banalicemos el concepto, por favor.
“Fluye. Si algo es para ti será fácil.”
Esta me encanta… Lo que que nos viene a decir es que si encuentras demasiados obstáculos para conseguir algo es que “no es para ti”. Que aquello que el universo nos ha preparado tiene que ser fácil y llegar a nosotros de manera natural.
Es decir. Que si para cobrar el paro tienes que ir 15 veces a la oficina porque cada vez te piden un papel nuevo, es mejor dejarlo, porque no es para ti… ¡¡Venga!!
Las cosas a veces cuestan, y hay que trabajar para conseguirlas. Una cosa es aceptar y otras resignarnos ¿no crees?
Conclusión
El Secreto y teorías similares se apoyan en que su eficacia no puede ser demostrada ni replicada. ¿No lo has conseguido? No lo estarías deseando con la suficiente fuerza. ¿Sí lo has alcanzado tu objetivo? Eso es porque lo has hecho bien.
Cuando alguien te da todas las respuestas… es el momento de empezar a dudar.
