Septiembre huele a cuaderno nuevo. Como dice nuestro querido Pablo Ojea, es enero_v2: otro comienzo.
Lo notamos en la ciudad que vuelve a moverse, en los horarios, en la cabeza que ya está escribiendo listas. Pero antes de apuntar propósitos perfectos, te propongo parar dos minutos y mirar de frente cómo te ha sentado el verano.
Cerrar bien lo que termina es el paso cero para empezar con sentido.
Por qué septiembre se siente como un “nuevo enero”
No es solo una sensación. Cambia la luz, bajan las temperaturas, vuelve la estructura.
Para muchas personas, septiembre activa el chip de inicio: organizarnos, retomar hábitos, decidir objetivos. Esa energía es valiosa, pero puede convertirse en presión si llega acompañada de “deberías” y comparaciones.
Desde psicología contextual y ACT, empezar con sentido es empezar desde la verdad: ¿dónde estoy hoy?, ¿qué me está pasando de verdad?, ¿qué necesito ahora?
La trampa de las expectativas del verano
El verano viene con un guion rígido: hay que descansar, viajar, disfrutar, tener la foto. La realidad es que para una parte de la gente no hay presupuesto, no hay red con quien compartir, la salud no acompaña o han ocurrido cosas que remueven: discusiones, separaciones, pérdidas, incertidumbre laboral.
Compararnos con veranos ideales solo suma culpa y ruido mental. No eres tu el problema; tu experiencia es válida.
Paso 0: haz el Test emocional del verano (2 minutos)
He preparado un test breve para ayudarte a poner palabras a tu experiencia estival y elegir un primer paso con criterio para septiembre.
No es un diagnóstico; es una guía práctica para entender si lo que pesa tiene más que ver con mente en bucle, con callarte tu verdad, con comparación y piloto automático, con falta de dirección, con rigidez para adaptarte o con eventos vitales que necesitan sitio.
Al terminar verás tu resultado y recibirás un email con recursos concretos. Guárdalo: será tu hoja de ruta para aterrizar septiembre con cabeza y corazón.
Qué mira el test (en clave ACT)
- Mente en bucle
Cuando los pensamientos se toman como verdades y mandan sobre lo que haces. Si notas ansiedad o rumiación persistente, puede ayudarte conocer cómo trabajamos la terapia para la ansiedad
- Evitación y límites
Cuando te callas tu verdad para no “liarla” y acabas viviendo a la contra de ti. Si hay historia de daño o bloqueos fuertes, quizá te interese leer sobre terapia para trauma
- Piloto automático y comparación
Cuando estás en un plan pero tu cabeza está en otro sitio, o te comparas con vidas editadas y te quedas sin presente.
- Dirección y valores
Cuando haces por “toca” y se te pierde el sentido. El enfoque de Terapia ACT
ayuda a reconectar con lo importante y traducirlo en acciones viables.
- Flexibilidad ante los cambios
Cuando cuesta adaptarte y repites patrones que ya no funcionan. Flexibilidad no es “dejarse llevar”: es elegir entre varias respuestas posibles ante lo mismo.
- Eventos vitales que remueven
Duelo, separación, enfermedad, mudanza, cambios laborales. No requieren prisa: requieren sitio. Si esto te resonó, el email que recibirás incluirá recursos de cuidado y ritual de cierre.
Síndrome postvacacional, ansiedad y comparación: por qué suelen asomar en septiembre
La vuelta condensa cambios de ritmo y expectativas. Es normal que el cuerpo tarde en ajustarse y que la mente compare tu vida con vidas editadas. Para una parte de la gente la palabra “rutina” da calma; para otra dispara ansiedad.
Si notas rumiación intensa, hipervigilancia, dificultades de sueño o un bucle de comparación que te roba el presente, el test y el email de recursos te orientarán sobre por dónde empezar. Si no remite, da un paso más y pide ayuda profesional.
¿Cuándo tiene sentido pedir ayuda?
Cuando lo has intentado y sigues bloqueado/a.
Cuando la evitación te deja sin vida: no sales, no hablas, cedes siempre.
Cuando aparecen síntomas que te desbordan o recuerdos intrusivos tras un evento.
Cuando necesitas un marco para ordenar pareja, familia o límites.
Te ofrezco una sesión de acogida gratuita, para entender qué te está pasando ahora y decidir juntxs el siguiente paso, sin compromiso. Reserva tu sesión de acogida
Cierra el verano, empieza con sentido
Antes de exigirte propósitos perfectos, regálate dos minutos para mirarte.
Haz el test, recibe tu guía y elige tu primer paso cuando estés lista.
Septiembre puede ser un buen comienzo si primero cierras bien lo anterior.
Haz el Test emocional del verano (2 min) → entra aquí
Material psicoeducativo. No sustituye una evaluación profesional. Si notas riesgo o malestar intenso, busca ayuda inmediata.