¿Alguna vez has sentido que el mundo te abruma, que las emociones te sobrepasan o que te sientes desconectado/a de lo que te rodea?
Si es así, quiero decirte que no es algo raro o que puede ser que seas PAS (Persona Altamente Sensible).
Todas las personas experimentamos momentos en los que nuestras emociones parecen tomar el control y sentimos que somos nosotros/as quienes lo perdemos, y es aquí donde quiero hablarte del concepto de ventana de tolerancia.
¿Qué es la Ventana de Tolerancia?
La ventana de tolerancia es un concepto (desarrollado por Siegel) que nos ayuda a entender el rango emocional óptimo en el que nos sentimos seguros y capaces de funcionar bien. Dentro de esta ventana, estamos en un espacio equilibrado, donde podemos enfrentar los desafíos de la vida con claridad y serenidad.
Imagina esta ventana como un marco que delimita tu zona de comodidad emocional. Cuando estás dentro de ella, puedes relacionarte con los demás, pensar con claridad y gestionar el estrés de manera efectiva.
Pero cuando te sales de este espacio, puedes entrar en dos estados que pueden ser difíciles de manejar:
- Hiperactivación: Aquí es donde las emociones se intensifican. Puedes sentirte ansioso, agitado, irritable o en un estado constante de alerta. En este estado, tu cuerpo está en modo de lucha o huida, lo que puede dificultar la concentración y la toma de decisiones. En resumen, estaríamos en un estado más ansioso.
- Hipoactivación: En este caso, te sientes desconectado, entumecido o abrumado. Puedes experimentar una falta de energía o de interés en las cosas que antes disfrutabas. Es como si te estuvieras "desvaneciendo" en lugar de estar presente. En resumen, estaríamos en un estado más depresivo.
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¿Por qué es importante conocer tu ventana de tolerancia?
Comprender tu ventana de tolerancia te permite ser más consciente de tus emociones y las respuestas que das ante ellas. Te ayuda a identificar cuándo estás dentro de tu espacio seguro y cuándo te has salido de él. Esta toma de conciencia es fundamental para poder actuar y regular tus emociones de manera efectiva y eficiente.
Estrategias para ampliar tu ventana de tolerancia
Aquí hay algunas estrategias prácticas que pueden ayudarte a mantenerte dentro de tu ventana de tolerancia y ampliar su espacio:
- Autoconocimiento: Tómate un tiempo para reflexionar sobre tus emociones y los disparadores, que llamamos en terapia de trauma para EMDR. ¿Qué situaciones o eventos tienden a sacarte de tu ventana de tolerancia? Reconocer estos factores es el primer paso para aprender a manejarlos.
- Mindfulness: La práctica de la atención plena puede ser un aliado poderoso. Aprender a estar presente en el momento te ayuda a observar tus emociones sin dejarte arrastrar por ellas. La meditación y la respiración consciente son excelentes herramientas para cultivar esta habilidad.
- Ejercicio físico: La actividad física libera endorfinas y ayuda a regular el estrés. Lo cierto es que quema tensión. Encuentra una forma de movimiento que disfrutes, ya sea caminar, bailar o practicar yoga. Esto te ayudará a mantener tu equilibrio emocional.
- Conexión social: Hablar con amigos o seres queridos sobre tus emociones puede ser liberador. No subestimes el poder de la conexión humana. Compartir tus experiencias puede ayudarte a sentirte respaldado y comprendido.
- Terapia psicológica y apoyo psicológico profesional: Si sientes que tus emociones te desbordan y esto llega a afectar tanto que te limita en una o varias áreas de tu vida, no dudes en buscar la ayuda de un profesional de la psicología porque puede ser una gran opción. La terapia puede ofrecerte herramientas y estrategias personalizadas para manejar tus emociones, y expandir tu ventana de tolerancia.
Queremos recordarte que tenemos un equipo especializado de psicólogos/as para hacer terapia psicológica online y que si lo necesitas estamos a tu disposición. Puedes solicitar tu cita de acogida gratuita.
Reflexión final
La ventana de tolerancia nos invita a ser compasivos con nosotros/as mismos/as. Todas las personas enfrentamos momentos de dificultad, y está bien sentirnos abrumados a veces porque no puede ser de otra forma.
El dolor, a veces en sus manifestaciones más agudas, forma parte de la vida. Lo importante es recordar que tenemos la capacidad de elegir, de volver a nuestro centro haciendo uso de nuestra resiliencia y cuidar de nuestro bienestar emocional con las herramientas que nos proporciona nuestra experiencia y la terapia psicológica.
Así que, la próxima vez que sientas que las emociones te llevan a un lugar incómodo, respira profundamente y recuerda que tienes las herramientas para regresar a ese marco donde puedes manejar la situación, tu ventana de tolerancia.
Cada pequeño paso cuenta, y cada intento de cuidar de ti mismo es un acto de amor. Confía en tus habilidades y trabaja en cuidar de ti mismo/a y desarrollarte personalmente; también en ponerte límites y poner límites a las demás personas.